DISCRIMINACIÓN SEXUAL

DISCRIMINACIÓN SEXUAL

Discriminación sexual significa tratamiento diferencial  debido al sexo. En los últimos años hemos  observado una creciente  incorporación de la mujer en la sociedad y ello se debe a sus deseos de participar en condiciones de igualdad en los centros de decisión en el mercado del trabajo, en la educación y en la vida  política, La mujer ha sufrido diferentes marginaciones a lo largo de la historia. Una de  éstas es la discriminación laboral, en la cual las mujeres no ejercen el mismo derecho que los hombre, ya se trate de  cuestiones económicas como de el estatus   de su trabajo.

CAMBIOS  EN LA SITUACIÓN   ACTUAL DE LA MUJER    

En el plano de la igualdad entre hombres y mujeres, la Constitución de 1978 marca un punto de inflexión en la situación social y jurídica de las mujeres españolas.  El  reconocimiento constitucional del  principio de igualdad es esencial. La creación en 1983 del Instituto de la Mujer  hace que no solo  se reconozca  la situación desigualitaria, sino que se da una importancia a la política de  igualdad y no discriminación en razón del sexo.  En los últimos años

, la sociedad española ha vivido un proceso de transformación. En términos cuantitativos, la magnitud del cambio se  refleja en ámbitos tan significativos como la educación, el empleo o las esferas de poder. Aún así, es decir, con estos cambios, la mujer sigue  hoy por hoy en una situación desfavorable en la sociedad.

 

SITUACIÓN LABORAL.

Como ya hemos dicho la situación  en el mundo laboral ha  estado marcada  por una serie de  progresos en los últimos años.. No obstante, hoy por hoy encontramos todavía demasiadas diferencias sexuales relacionadas con el trabajo, ya sea a nivel de   ocupación o a nivel económico, por ejemplo.

Así  tenemos que la incorporación de la mujer al mundo laboral sigue un proceso creciente desde hace algunas décadas, pero la realidad pone en evidencia que su incorporación plena a todos los derechos sociales y económicos es considerablemente deficitaria. Los datos nos demuestran como las mujeres no se han incorporado todavía , en  la misma medida que los hombres , cómo sus contratos son los más deficitarios y cómo su salario es menor por un trabajo de igual valor.  El tema de las remuneraciones económicas es  de los temas más polémicos en cuanto a las diferencias laborales entre hombres y mujeres,.

LOS SALARIOS:

Los salarios de las mujeres son inferiores a los que reciben los hombres. Su retribución es en general, de un 20% inferior a la de los hombres. Además a medida que aumenta la edad, las diferencias salariales también aumentan. Los motivos de estas diferencias salariales son diversos: diferencias e las profesiones y empleos desarrollados por hombres y mujeres, desigualdad en el acceso  a puestos directivos, diferencias por sectores de pertenencia, discriminación salarial…

 

LA MUJER EN EL MUNDO DE LA COMUNICACIÓN:

Aunque ha aumentado el número de mujeres profesionales en el sector de las comunicaciones, son pocas las que ocupan puestos directivos que puedan influir en la política de la información. La persistente  idea de estereotipos sexistas se debe en gran parte  en la proyección a través de los medios de comunicación de imágenes negativas y degradantes de las figuras de las mujeres.

Es  muy significativo analizar cómo se transmite la imagen de las mujeres a través de los medios de comunicación: Estos son unos datos objetivos sobre el papel del mundo en  el área de la comunicación:

-En la publicidad, su  rol normal es condicionados al objeto  que se vende. La característica de los cuerpos femeninos son utilizadas con mayor frecuencia que las de los masculinos..

– La mujer está presente en los medios de comunicación en gran medida y en muchos casos al mismo nivel que el   hombre. Sin embargo su presencia es selectiva y pone de manifiesto cierta discriminación sexual. Las mujeres tienen una presencia mayor en las teleseries y en los concursos, además de la publicidad, En cambio los hombres en  los deportes y en la información.

 

EL FEMINISMO

En 1976 hubo una auténtica eclosión de grupos de mujeres. Muchos de ellos tenían vínculos con los partidos políticos o sindicatos. Otros querían agrupar a mujeres que vivían situaciones especiales, como la asociación de mujeres separadas. Algunos se proclamaban independientes y practicaban la «autoconciencia». Estaban las mujeres universitarias y también vocalías de mujeres de barrios. La primera andadura organizativa fue una coordinadora, pero la estructura de «delegación de poderes» era poco dinámica por lo que a los tres años pasamos a funcionar como asamblea donde cada mujer era un voto. Los temas más debatidos fueron el aborto y el divorcio.

En el número correspondiente al mes de Abril, la revista «Mujeres de europa», hacía referencia en su editorial, a una encuesta de opinión realizada en 1996 por la comisión Europea a más de 21.000 personas de toda la U.E., en la que se revela que la mitad de los europeos estiman que «la igualdad de Oportunidades refuerza la Democracia, favorece el desarrollo personal y mejora las relaciones humanas». El 40% de las personas encuestadas considera que, para eliminar las desigualdades, tanto los hombres como las mujeres deben cambiar y que los campos de predilección para este cambio son un mejor reparto de las tareas familiares y el respeto a la identidad de hombres y mujeres.

Sólo si los hombres y mujeres compartiéramos equitativamente responsabilidades políticas y domésticas el concepto de ciudadanía podría alcanzar su sentido verdadero: las personas, con indiferencia de su sexo, podrían participar como iguales -que no idénticos- en la toma de decisiones políticas sobre sus vidas. Sin embargo, la realidad es otra. La contradicción entre el valor universal de ciudadanía y una experiencia de vida sexualmente diferenciada cuestiona el mito de la homogeneidad entre ciudadanos y ciudadanas.

Por eso el problema de igualdad entre los sexos es el problema de desigualdad de las mujeres en relación con los hombres. Traducir diferencia por desigualdad ha sido el mecanismo utilizado: dado que las mujeres no están constituidas biológicamente como los varones, se acepta tranquilamente que no tengan los mismos derechos

 

BIBLIOGRAFÍA

  • El Derecho de la mujer. , Tove Satng Dahl

Vindicacion feminista publicaciones.,1988

http://buscar.ozu.es/cgi-bin/ozu_search.cgi

  • La  mujer en cifras.  Ministerio de asuntos sociales

Instituto de la mujer, 1992

 

  • III PLAN PARA LA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES ENTRE HOMBRES Y MUJERES. 1997-2000.